I'm sorry, but the comment system I used in the blog went out of business, and I had to remove it. The comments are not gone, I have a backup, but I won't be able to restore them to their original location in a long, long time... if I do so one day... It really pisses me off, but there's no other option...
For the same reason, I couldn't answer marton (thanks a lot for your kind comment... it was a real surprise) and grancabeza, a reader that ended up here randomly (thanks as well for your kind comments, you're very welcome here...)
Lo siento, pero el sistema de comentarios que utilizaba ha cerrado, los cabrones que lo mantenian lo han cerrado. Asi pues, ya no hay comentarios en el blog... tengo una copia de todos, pero dudo mucho que algun dia tenga la paciencia para republicarlos todos en su lugar correspondiente... Me jode, pero no hay otra via...
Por la misma razon, no he podido contestar los ultimos comentarios... Marton, gracias por tu comentario, fue realmente una sorpresa.... y grancabeza, un lector que acabo por aqui al azar, gracias tb por tu comentario... eres bienvenido...
jueves, 31 de agosto de 2006
jueves, 24 de agosto de 2006
Taxis, helado, sexo
Hoy he leido que escribir mentalmente es signo de locura incipiente. Asi que yo debo estar volviendome loco, porque ultimamente no paro de escribir mentalmente, a todas horas, mientras ando por esta ciudad infame y deliciosa a un tiempo. Sucede de repente, sin previo aviso, un acto reflejo igual que mover las piernas ciclicamente para andar.
Empiezo a caminar y ya veo en mi cabeza una mano que escribe, porque cuando escribo mentalmente siempre es a mano, aunque yo no creo que el detalle signifique nada en especial. La mano escribe y entonces se me aparecen montones de palabras alineadas, y voy leyendo frases en el papel de mi corteza craneal, y pierdo toda conexion con la urbe y con las calles y con las gentes y con los reflejos de los rascacielos en el agua de las aceras, y con las aceras y con los taxis locos, todos iguales, todos Toyota de los anyos ochenta, rojos y blancos, cuatro puertas, conducidos por maniacos con jornadas de 16 horas, sonrientes y felices de haber dejado atras la mainland, la China querida de los intelectuales izquierdosos de mierda de occidente.
Y ustedes saben bien que una relacion sin sexo es como un helado demasiado frio o demasiado caliente. El helado, de nata con nueces o de mango o de avellana o de pistacho. El helado, y esos dos o tres minutos en que alcanza su temperatura perfecta, su tacto perfecto, y nuestra boca lo acoge en todo su esplendor, extasiada, toda gusto, en conexion directa con la libido cerebral, y el placer es solo comparable al roce de los sexos en los momentos que preceden al orgasmo, a la descarga, al deshielo del helado semifredo, flacido, felizmente derrotado, deshecho.
Loco, loco, loco ando y escribo y sorteo a los malditos taxis y desde un puente tomo una fotografia en blanco y negro de una princesa china que corre para coger el autobus. Y de postre, helado.
martes, 22 de agosto de 2006
When love comes to town
Mi relacion con el tabaco comenzo a los 13 anyos. En casa de mi primo, fumamos media cajetilla Marlboro de su padre, de mi tio, y despues nos apresuramos, se apresuro, a abrir las ventanas y ventilar la habitacion zarandeando unas toallas en el aire, como si regresaramos de la playa y quisieramos limpiarlas de arena. Limpiar el humo del aire como la arena de las toallas.
Mi primo: fuerte, guapo, agresivo. Mi primo: lo que yo no era. Mi primo: lo que queria ser, a los 13 anyos. Sonaba el Out of Time de REM, Losing my religion, entonces un vinilo, y yo fume el primer cigarrillo de mi vida. Sonaba BB King en el Ratl'n'um de U2, When love comes to town, y yo fumaba mi segundo cigarrillo.
((Esta noche, Hong Kong, el agua gotea desde los aires acondicionados de infinitos apartamentos de rascacielos infinitos. Esta noche, el agua dibuja estanques de humedad y tedio y hormigon en las aceras, y yo fumo y contemplo sentado en un banco de piedra blanca, y una vieja a mi lado se va girando y me mira, y si estuviera en barelona diria que desconfia, pero en Hong Kong quizas deberia ser yo el desconfiado, asi que pongo a la vista la bolsa de ropa de la tintoreria, Sun Dick Dry Cleaners, curioso nombre, y ya ve usted vieja que no soy turista y llevo apenas el cambio de la tintoreria en los bolsillos, y la barba espesa y el corazon espeso, y por eso fumo aqui con usted, pero no hay manera, no fluye la comunicacion entre corazon y mente y sexo, y usted sigue mirandome y ahora si ya veo que es solo una vieja desamparada como las viejas de barcelona, y en el fondo tenemos usted y yo mas en comun de lo que usted pueda pensar ahora, mientras me examina, aunque quizas lo este pensando, y piensa bien, vieja, porque usted, mucho antes que yo, ya se sento en este banco y fumo y penso y vio a una vieja sentada a su lado que de vez en cuando se giraba para examinarla con ojos de vieja.))
Mi primo: fuerte, guapo, agresivo. Mi primo: lo que yo no era. Mi primo: lo que queria ser, a los 13 anyos. Sonaba el Out of Time de REM, Losing my religion, entonces un vinilo, y yo fume el primer cigarrillo de mi vida. Sonaba BB King en el Ratl'n'um de U2, When love comes to town, y yo fumaba mi segundo cigarrillo.
((Esta noche, Hong Kong, el agua gotea desde los aires acondicionados de infinitos apartamentos de rascacielos infinitos. Esta noche, el agua dibuja estanques de humedad y tedio y hormigon en las aceras, y yo fumo y contemplo sentado en un banco de piedra blanca, y una vieja a mi lado se va girando y me mira, y si estuviera en barelona diria que desconfia, pero en Hong Kong quizas deberia ser yo el desconfiado, asi que pongo a la vista la bolsa de ropa de la tintoreria, Sun Dick Dry Cleaners, curioso nombre, y ya ve usted vieja que no soy turista y llevo apenas el cambio de la tintoreria en los bolsillos, y la barba espesa y el corazon espeso, y por eso fumo aqui con usted, pero no hay manera, no fluye la comunicacion entre corazon y mente y sexo, y usted sigue mirandome y ahora si ya veo que es solo una vieja desamparada como las viejas de barcelona, y en el fondo tenemos usted y yo mas en comun de lo que usted pueda pensar ahora, mientras me examina, aunque quizas lo este pensando, y piensa bien, vieja, porque usted, mucho antes que yo, ya se sento en este banco y fumo y penso y vio a una vieja sentada a su lado que de vez en cuando se giraba para examinarla con ojos de vieja.))
viernes, 18 de agosto de 2006
Recursos
(en las proximas tres semanas, fruitman escribira sin acentos, utilizara la ny en lugar de la n con tilde, y otras faltas ortograficas desconocidas en hong kong, pero lugares comunes para las cultas y refinadas lectoras de este blog... se ruega comprension y apoyo moral)
Llegue a Hong Kong y habian perdido mi equipaje. Curioso, pero tuve este presentimiento durante todo el viaje, y por lo tanto cuando me lo dijeron no me enoje, ni tampoco me sorprendio. Acogi con indiferencia la noticia, di mi direccion y las gracias y hasta otra.
Por cierto, baje del avion por escalera, que es algo que nunca habia hecho (siempre pasando por el aburrido tunel) y que tuvo su gracia, ademas de permitirme comprobar que el clima sigue siendo tropical incluso en las pistas de aterrizaje, aunque no tan caliente como de costumbre porque la semana pasada tuvieron algunos tifones, y claro, se mantiene el fresco (ahora mismo tengo el aircon al minimo y la mar de bien)
El reencuentro fue pausado, distante, de reconocimiento mutuo, aunque yo me moria por besarla y recuperar a marchas forzadas la pasion perdida. Pero voy a ser paciente, se que cada anyo ocurre igual, aunque no dejo de sentirme triste y extranyamente solo, deseando mas que nunca una cerveza bien fria. Son las 8 de la manyana y quiero una cerveza muy fria: es lo bueno que tiene el jet lag, que ahora para mi son las dos de la manyana, y yo a las dos de la manyana, si estoy despierto, tengo una cerveza en la mano :)
Llegue a Hong Kong y habian perdido mi equipaje. Curioso, pero tuve este presentimiento durante todo el viaje, y por lo tanto cuando me lo dijeron no me enoje, ni tampoco me sorprendio. Acogi con indiferencia la noticia, di mi direccion y las gracias y hasta otra.
Por cierto, baje del avion por escalera, que es algo que nunca habia hecho (siempre pasando por el aburrido tunel) y que tuvo su gracia, ademas de permitirme comprobar que el clima sigue siendo tropical incluso en las pistas de aterrizaje, aunque no tan caliente como de costumbre porque la semana pasada tuvieron algunos tifones, y claro, se mantiene el fresco (ahora mismo tengo el aircon al minimo y la mar de bien)
El reencuentro fue pausado, distante, de reconocimiento mutuo, aunque yo me moria por besarla y recuperar a marchas forzadas la pasion perdida. Pero voy a ser paciente, se que cada anyo ocurre igual, aunque no dejo de sentirme triste y extranyamente solo, deseando mas que nunca una cerveza bien fria. Son las 8 de la manyana y quiero una cerveza muy fria: es lo bueno que tiene el jet lag, que ahora para mi son las dos de la manyana, y yo a las dos de la manyana, si estoy despierto, tengo una cerveza en la mano :)
miércoles, 16 de agosto de 2006
Una camiseta blanca
He salido de casa de Jorge atraído por la música de Miles Davis en la plaça del Diamant. Pero no he visto a nadie, así que he seguido hasta tomar Verdi, y luego he torcido por Providència a la derecha. Había dejado de llover y la gente salía de nuevo a la calle, "como los caracoles tras la lluvia" he oído que decía algún vecino. Son las fiestas de Gracia, y la gente quiere salir, claro.
Caminando, he encendido un cigarrillo y he comenzado a pensar en la forma de este post, en las cosas que podría decir. Como por ejemplo, un pobrecillo que me ha tocado al lado, y que iba relatando el origen gitano de Gracia a su acompañante, fémina, curiosa por conocer la realidad del barrio de hace 500 años. O más bien indiferente e incluso molesta, pensando en por qué los demás viandantes iban todos con una cerveza en la mano y una sonrisa en la cara. Gitanos.
Y bueno, entonces he visto que Ada, así sin hache, venía caminando por la acera de enfrente. En ese momento me ha parecido lo más natural, y la he llamado y la he saludado y me ha dicho que iba para casa de Jorge a encontrarnos, porque ya sus amigos se habían ido. Y bueno, pues yo ya me iba para casa, Ada, pero podemos tomar una última cerveza. Y en el banco de la plaza Ada me ha contado que la habían llamado para un nuevo trabajo, y "no sé qué hacer".
((Ada, preciosa con su chaqueta de estampado militar muy clarito, sobre fondo beig. Y con sus ojos oscuros y el pelo muy estirado para atrás, con el clip, dejando descubierta la frente. Las gafas negras con reflejos blancos, los pantalones fucsia con pata de elefante, que lo malo que tienen cuando llueve es que se mojan todos por abajo. Zapatos negros esta vez, los mismos que todas las veces que estuviste en casa.))
Pero estábamos como cansados, y en lo que terminó la cerveza nos pusimos a andar de nuevo, esta vez en el mismo sentido, esta vez camino a casa. Y en la esquina con Escorial me he despedido de Ada por segunda vez, nos vemos en Septiembre. Y he cruzado, de nuevo solo, sin acento y hacia el coche, y he pensado en que te acababa de decir que te echaría de menos. Y es cierto, he pensado mientras entraba en el coche y ponía en marcha el acelerador y la radio.
Barcelona tras la lluvia tiene la magia de las ciudades que te atrapan. Te atrapan, como una noche con Jorge, o con Ada. Te atrapan, porque están hechas a tu medida, con tus pasiones y tus tristezas y tus alegrías mezcladas en su asfalto, en su piel, en una camiseta blanca, en unas pizzas del paki.
Caminando, he encendido un cigarrillo y he comenzado a pensar en la forma de este post, en las cosas que podría decir. Como por ejemplo, un pobrecillo que me ha tocado al lado, y que iba relatando el origen gitano de Gracia a su acompañante, fémina, curiosa por conocer la realidad del barrio de hace 500 años. O más bien indiferente e incluso molesta, pensando en por qué los demás viandantes iban todos con una cerveza en la mano y una sonrisa en la cara. Gitanos.
Y bueno, entonces he visto que Ada, así sin hache, venía caminando por la acera de enfrente. En ese momento me ha parecido lo más natural, y la he llamado y la he saludado y me ha dicho que iba para casa de Jorge a encontrarnos, porque ya sus amigos se habían ido. Y bueno, pues yo ya me iba para casa, Ada, pero podemos tomar una última cerveza. Y en el banco de la plaza Ada me ha contado que la habían llamado para un nuevo trabajo, y "no sé qué hacer".
((Ada, preciosa con su chaqueta de estampado militar muy clarito, sobre fondo beig. Y con sus ojos oscuros y el pelo muy estirado para atrás, con el clip, dejando descubierta la frente. Las gafas negras con reflejos blancos, los pantalones fucsia con pata de elefante, que lo malo que tienen cuando llueve es que se mojan todos por abajo. Zapatos negros esta vez, los mismos que todas las veces que estuviste en casa.))
Pero estábamos como cansados, y en lo que terminó la cerveza nos pusimos a andar de nuevo, esta vez en el mismo sentido, esta vez camino a casa. Y en la esquina con Escorial me he despedido de Ada por segunda vez, nos vemos en Septiembre. Y he cruzado, de nuevo solo, sin acento y hacia el coche, y he pensado en que te acababa de decir que te echaría de menos. Y es cierto, he pensado mientras entraba en el coche y ponía en marcha el acelerador y la radio.
Barcelona tras la lluvia tiene la magia de las ciudades que te atrapan. Te atrapan, como una noche con Jorge, o con Ada. Te atrapan, porque están hechas a tu medida, con tus pasiones y tus tristezas y tus alegrías mezcladas en su asfalto, en su piel, en una camiseta blanca, en unas pizzas del paki.
martes, 15 de agosto de 2006
Y ser sólo, a veces
Y ya iba a escribir algún juego complicado. Pero paso. Paso de aspirar a lo complejo ahora mismo: me abandono al fluir pausado del porro, ondulado, suave como tu pelo. Y me instalo en el Bulevar de los Sueños Rotos de Sabina.
La simpleza de esta noche no me admira, pero va a ser difícil en Hong Kong. No hay sueños rotos en Hong Kong, no para mí. Los sueños en Hong Kong son inmaculados, blancos, fáciles, casi estériles.
A veces, me gustaría poder enamorarme y saber dejarlo todo. Y ser sólo una canción que no te cansas de escuchar. Una canción que entra por la ventana cada noche, y acaricia tu piel como una brisa.
A veces, me gustaría poder decir que te voy a echar de menos.
La simpleza de esta noche no me admira, pero va a ser difícil en Hong Kong. No hay sueños rotos en Hong Kong, no para mí. Los sueños en Hong Kong son inmaculados, blancos, fáciles, casi estériles.
A veces, me gustaría poder enamorarme y saber dejarlo todo. Y ser sólo una canción que no te cansas de escuchar. Una canción que entra por la ventana cada noche, y acaricia tu piel como una brisa.
A veces, me gustaría poder decir que te voy a echar de menos.
domingo, 13 de agosto de 2006
La ciudad de uno
Hace ya tres semanas que no trabajo por las tardes. De todas ellas, sólo una la he dedicado a escribir. Las otras se repartieron entre acontecimientos desgraciados, amigos, compras, recados pendientes, limpiezas, traslados, llamadas, piscinas, películas, visitas al médico, cervezas, despedidas,... No me arrepiento, aunque no deja de joderme un poco que cada año me suceda lo mismo, y que me cueste tanto encontrar tiempo para estar completamente solo.
Pero es quizás inevitable, y de poco sirve lamentarse. Por delante tengo tres semanas más en las que sí voy a estar solo. Completamente solo en la ciudad donde reside una de las personas a las que más quiero y menos veo. Paradojas de la vida.
Pero es quizás inevitable, y de poco sirve lamentarse. Por delante tengo tres semanas más en las que sí voy a estar solo. Completamente solo en la ciudad donde reside una de las personas a las que más quiero y menos veo. Paradojas de la vida.
domingo, 6 de agosto de 2006
No control
¿Qué ocurre cuando el instinto te domina? ¿Qué ocurre cuando eres consciente, pero no capaz de optar por lo más sensato?
Sucede a menudo con unos cubatas en el cuerpo: has perdido la inhibición, los prejuicios, la moral, y te guía sólo la carne. Acompañada quizás del raciocinio del cerebro, pero un raciocinio únicamente enfocado a la carne.
Es un cliché, cierto, aunque muchas veces nos averguenza, y queremos ocultarlo y acabamos haciendo el ridículo. Quizás, cuando la carne llama impregnada de j&b con cola, lo más sensato sea atender la llamada en toda su grandeza, y afrontar el reto como quien se enfrenta a cualquier otro designio de la vida cotidiana.
Cuando dentro de 30 años apenas seas capaz de encenderte ni con whisky, el polvo que esta noche no tuvimos será un pasaporte a la piel tensa de tus senos, a la fácil humedad de tu sexo de hoy.
Y volveremos a brindar, y reiremos, viejos ya, seguros de no poder volver ni siquiera a la posibilidad de desechar un buen polvo.
Sucede a menudo con unos cubatas en el cuerpo: has perdido la inhibición, los prejuicios, la moral, y te guía sólo la carne. Acompañada quizás del raciocinio del cerebro, pero un raciocinio únicamente enfocado a la carne.
Es un cliché, cierto, aunque muchas veces nos averguenza, y queremos ocultarlo y acabamos haciendo el ridículo. Quizás, cuando la carne llama impregnada de j&b con cola, lo más sensato sea atender la llamada en toda su grandeza, y afrontar el reto como quien se enfrenta a cualquier otro designio de la vida cotidiana.
Cuando dentro de 30 años apenas seas capaz de encenderte ni con whisky, el polvo que esta noche no tuvimos será un pasaporte a la piel tensa de tus senos, a la fácil humedad de tu sexo de hoy.
Y volveremos a brindar, y reiremos, viejos ya, seguros de no poder volver ni siquiera a la posibilidad de desechar un buen polvo.
jueves, 3 de agosto de 2006
Driftin'
Nadie toca como él, y su toque es mi debilidad absoluta. Yo creo que regalaría un año de sexo por tocar una noche como él.
Esta guitarra de Clapton en su álbum "Blues" me tiene hechizado, parece que después de muchos años la haya redescubierto, más poderosa que nunca.
Y ahora me tiene aquí despierto, esperando otra noche de calor que deseo dormir a gusto, aunque ya es demasiado tarde y mañana estaré muerto una vez más.
Una amiga me dijo, cuando puse a Clapton en el CD, que le recuerda a la música que escucha su padre. Querida, tu padre tiene buen gusto. Y así me despido de ustedes drifteando, como un barco sobre la mar...
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
Well I ain't got nobody in this world to care for me.
If my baby would only take me back again.
If my baby would only take me back again.
I would feel much better, darling, and at least I'd have a friend.
I give you all my money, tell me what more can I do.
I give you all my money, tell me what more can I do.
You is a sweet little girl but I swear you won't be true.
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
Because I ain't got nobody in this world to care for me.
Esta guitarra de Clapton en su álbum "Blues" me tiene hechizado, parece que después de muchos años la haya redescubierto, más poderosa que nunca.
Y ahora me tiene aquí despierto, esperando otra noche de calor que deseo dormir a gusto, aunque ya es demasiado tarde y mañana estaré muerto una vez más.
Una amiga me dijo, cuando puse a Clapton en el CD, que le recuerda a la música que escucha su padre. Querida, tu padre tiene buen gusto. Y así me despido de ustedes drifteando, como un barco sobre la mar...
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
Well I ain't got nobody in this world to care for me.
If my baby would only take me back again.
If my baby would only take me back again.
I would feel much better, darling, and at least I'd have a friend.
I give you all my money, tell me what more can I do.
I give you all my money, tell me what more can I do.
You is a sweet little girl but I swear you won't be true.
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
I'm drifting and drifting, just like a ship out on the sea.
Because I ain't got nobody in this world to care for me.
miércoles, 2 de agosto de 2006
Bueno pues
Iba a contarles que he comenzado, hoy mismo, a escribir una novela, o un cuento largo... tengo un par de pequeñas historias de dos mujeres que me interesaría explorar, recrear en mi mente... pero estoy todavía pensando, hilvanando, buscando la forma para el contenido disperso.
En fin, yo les iba a contar un poco de estas historias, pero llegaron mis adorables vecinos, y me invitaron a una copita de grappa, y un trozo de pastel argentino riquísimo, y algo de un porro, y bueno, ya ven la hora que se me ha hecho y la pereza que se ha apoderado de mi; y es que lo único que me preocupa ahora mismo es si voy a pasar tan mala noche como ayer, sin poder dormir, con el puto calor y los putos mosquitos, compañeros inseparables en la tortura del verano húmedo...
Así que buenas noches, queridas lectoras, mis adorables vecinas del cyberespacio.
En fin, yo les iba a contar un poco de estas historias, pero llegaron mis adorables vecinos, y me invitaron a una copita de grappa, y un trozo de pastel argentino riquísimo, y algo de un porro, y bueno, ya ven la hora que se me ha hecho y la pereza que se ha apoderado de mi; y es que lo único que me preocupa ahora mismo es si voy a pasar tan mala noche como ayer, sin poder dormir, con el puto calor y los putos mosquitos, compañeros inseparables en la tortura del verano húmedo...
Así que buenas noches, queridas lectoras, mis adorables vecinas del cyberespacio.
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