viernes, 28 de septiembre de 2007

Caldo con fideos



Tengo un litro de caldo en la nevera. Caldito de pollo, del bueno, que ahora pongo al fuego junto a unas verduras y un puñado de fideos Gallo. ¿Sienten el olorcito?

A mí el caldo de pollo con fideos me recuerda a Kiko Veneno.

Una mancha en la sabana
caldito de tu cuerpo
tu tienes el mismo agua
que me corre por dentro.

Y Kiko Veneno me transporta a una noche de verano en el Forum, y esa noche a un apagón de luces, y la oscuridad y la brisa me recuerdan a tus ojos, y tus ojos al mar, y el mar a una casa fría, y el frío a la nevera, y la nevera al caldo. Al caldo de pollo con fideos.

Buen provecho, mis amados lectores y lectoras.

2 comentarios:

  1. Pero no porque te hayas quemado la lengua con un caldo, significa que tengas que odiar a llama viva a todos los caldos, porque los caldos no se pueden comparar, como no se puede comparar bush con napoleon, o henry fonda con johny depp, o messi con cubala, asi que si hubiese sido más frio ese caldo, quiza hoy tendria lengua y no escribiria. Pero bueno, hoy estoy bien, sin miedo.

    tags: filosofia, sopa, traumas.

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  2. la próxima vez adecuaré la temperatura del caldo a tu delicado cuerpo, mi querido landiman...

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